1 de febrero de 2011

no hay ningún momento que se pueda comparar al amor

solo vine a ver el jardín.
tengo frío en las manos.
frío en el pecho.
frío en el lugar donde en los demás se forma el pensamiento.
no es este el jardín que vine a buscar
a fin de entrar, de entrar, no de salir

por favor, no creas que me lamento.
si comprendieras la voluptuosidad de comprobar

me amaron, a lo menos eso dijeron.
muchos me amaron porque no soy parecida más que a mí
y por otros imponderables más bellos que la sonrisa de la Virgen
________________________________________/ /de las Rocas
.
yo ahora creo amar y me siento acabada, epilogada
¿cómo aprender los gestos primarios
de las pasiones elementales?
.
No me consuela.

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