7 de agosto de 2014

brotar

sobreviene
se impone.
como un soplo
como un entre

surge,
de lo hondo
de la luz perenne
de lo acontecido.

un brote,
nosotros
de nosotros,
reverdeciendo.

11 de febrero de 2014

Agua


Óyeme como quien oye llover,
ni atenta ni distraída,

pasos leves, llovizna,
agua que es aire, aire que es tiempo,
el día no acaba de irse,
la noche no llega todavía,
figuraciones de la niebla
al doblar la esquina,
figuraciones del tiempo
en el recodo de esta pausa,
óyeme como quien oye llover,
sin oírme, oyendo lo que digo
con los ojos abiertos hacia dentro,
dormida con los cinco sentidos despiertos,
llueve, pasos leves, rumor de sílabas,
aire y agua, palabras que no pesan:
lo que fuimos y somos,
los días y los años, este instante,
tiempo sin peso, pesadumbre enorme,
óyeme como quien oye llover,
relumbra el asfalto húmedo,
el vaho se levanta y camina,
la noche se abre y me mira,
eres tú y tu talle de vaho,
tú y tu cara de noche,
tú y tu pelo, lento relámpago,
cruzas la calle y entras en mi frente,
pasos de agua sobre mis párpados,
óyeme como quien oye llover,
el asfalto relumbra, tú cruzas la calle,
es la niebla errante en la noche,
es la noche dormida en tu cama,
es el oleaje de tu respiración,
tus dedos de agua mojan mi frente,
tus dedos de llama queman mis ojos,
tus dedos de aire abren los párpados del tiempo,
manar de apariciones y resurrecciones,
óyeme como quien oye llover,
pasan los años, regresan los instantes,
¿oyes tus pasos en el cuarto vecino?
no aquí ni allá: los oyes
en otro tiempo que es ahora mismo,
oye los pasos del tiempo
inventor de lugares sin peso ni sitio,
oye la lluvia correr por la terraza,
la noche ya es más noche en la arboleda,
en los follajes ha anidado el rayo,
vago jardín a la deriva
—entra, tu sombra cubre esta página.

Volver en las palabras de Octaviocuando llueve y el cuerpo es leve.
Pasos de agua sobre mis párpados. Óyeme como quien oye llover, 1987

11 de noviembre de 2012

sin puntos


despertar
ahogo inconcluso que quiebra un día.
ir y venir de un tiempo suspendido 
que no toca nunca el suelo.

los nombres exigen
limitan, corrigen
gritos de sentido
que piden
reclaman
deseos de medida

mares y amares
rebosan,
emanan sin marcas 
sin destinos 
ilimitado espacio de escape

dame el gesto de la noche
el gesto que nombra sin nombres
mendigo, sin voces.

28 de julio de 2012

Presagios


Agua en la noche, serpiente indecisa,
silbo menor y rumbo ignorado:
¿Qué día nieve, qué día mar? Dime.
¿Qué día nube, eco
de ti y cauce seco?
Dime.
—No lo diré: entre tus labios me tienes,
beso te doy, pero no claridades.
Que compasiones nocturnas te basten
y lo demás a las sombras
déjaselo, porque yo he sido hecha
para la sed de los labios que nunca preguntan.

Pedro Salinas, 1924




6 de mayo de 2012

No, no es el amor quien muere.


Este decir la verdad no representa gran mérito. Además es tan poco: siempre procuro comunicar algo incomunicable, explicar algo inexplicable, relatar algo que tengo en los huesos y que sólo puede ser
vivenciado en esos huesos. Quizá, en el fondo, no sea otra cosa que ese miedo del cual tanto hemos hablado; pero un miedo extendido a todo, miedo tanto a lo más grande, como a lo más pequeño, miedo paralizante a pronunciar una palabra. Quizá ese miedo no sea sólo miedo sino afán de algo que está por encima de todo lo que provoca miedo, es completamente absurdo.

Franz Kafka, para Mílena.

26 de abril de 2012

¿qué puedo hacerle al viento que me quita tu canto si tu le das alas?

"pero algo en ellos era frágil, efímero, poco convincente, o quizás se ponían así por algún fenómeno químico, al entrar en contacto con Sofía, o cuando Sofía, o algo en Sofía -una cierta creencia en la densidad, la idea de que todo lo que no era denso era una traición a la experiencia- los recortaba contra el fondo sentimental de la conversación donde se debilitaban como estrellas fugaces"


Alan Pauls, El pasado.

24 de abril de 2012

¿No me prestás tu mano en esta noche de fìn de año de lechuzas roncas?

Como esta vida que no es mía
y sin embargo es la mía,
como este afán sin nombre
que no me pertenece y sin embargo soy yo;
Como todo aquello que de cerca o de lejos
me roza, me besa, me hiere,
tu presencia está conmigo fuera y dentro,
es mi vida misma y no es mi vida,
así como una hoja y otra hoja
son la apariencia del viento que las lleva.
Luis Cernuda.

5 de diciembre de 2011

mis manos inventan otro cuerpo a tu cuerpo





tus 
manos
inventan
otro 
cuerpo


cuerpo.

25 de noviembre de 2011

sólo el despliegue

 




a fuerza de sufrir, perdí los límites de mi cuerpo y me desmesuré irresistiblemente.

4 de noviembre de 2011

vaivén


vamos y venimos.
tirando de hilitos,
buscando siempre otro revés.

entre nosotros,
contingencia imprevista,
desencuentro, siempre.

¿de dónde brotamos?
¿de qué rincón ignorado del mundo?
¿sobre qué tierra seca crecimos?
¿qué vamos a dar?